¿“El que se haga discípulo de Cristo, será el candidato apropiado para ser bautizado”?



Por Josué I. Hernández


“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén” (Mat. 28:19,20).


Algunos enseñan, “El que se haga discípulo de Cristo, será el candidato apropiado para ser bautizado”. Ellos creen que hay discípulos de Cristo que no son salvos aún. Pero, Jesucristo no dijo eso en Mateo 28:19,20.

  • Luego de afirmar su total potestad (Mat. 28:18), Cristo la ejerció comisionando a sus apóstoles a predicar el evangelio a todas las naciones (cf. Mar. 16:15).
  • Cristo no habla aquí de tres acciones distintas, como predican algunos (primero, hacer discípulos; luego, bautizar a los discípulos; y por último, enseñar a los bautizados). Cristo comisionó a sus apóstoles a hacer algo (“haced”), y les dijo cómo hacerlo.
  • Si usted leyó bien, verá que Cristo no dijo: “haced discípulos, bautizad discípulos, y enseñad a los que se hayan bautizado”.
  • Ahora, fije su atención en el verbo principal, “haced”, y luego considere como los otros verbos subordinados (“bautizándolos” y “enseñándoles”) dependen de este. El verbo “haced” (gr. “matheteusate”) es un verbo que abarca todo el proceso identificado por Jesucristo en este texto. Éste es el único verbo usado en el texto griego, pues los otros son participios (“yendo”, “bautizando”, “enseñando”) que muestran cómo el mandamiento había de llevarse a cabo.
  • En nuestra versión española que ahora usamos (RV 1960), por lo tanto, nos encontramos con dos frases subordinadas que dependen de otra principal, donde el verbo principal es “haced” (tal como en el texto griego). La frase principal es “id, y haced discípulos” y los verbos subordinados (que indican cómo hacer discípulos) son “bautizándolos…” y “enseñándoles…”
  • Los verbos “bautizándoles” y “enseñándoles” son gerundios, demostrándose como dependientes de la acción del verbo principal, “haced”. Es decir, los verbos “bautizándoles” y “enseñándoles” explican cómo hacer discípulos.
  • No existe Biblia para afirmar: “El que se haga discípulo de Cristo, será el candidato apropiado para ser bautizado”. Lo que aprendemos de la sagrada Escritura es que el candidato apropiado para ser bautizado es aquel que se haya arrepentido por la fe en Cristo, confesando la deidad de Jesús de Nazaret (cf. Luc. 24:47; Hech. 2:38,41,47; Rom. 10:9), aquel candidato al ser bautizado en Cristo  (Gal. 3:26,27) será constituido discípulo de él.