Por Josué I. Hernández
Hay poderosas razones por las cuales los cristianos querrían vivir de esta manera. En primer lugar, minimizar la persecución. Existe un conflicto natural entre el bien y el mal, entre la verdad y el error, y aquellos que siguen esos dos caminos. “Y en verdad, todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús, serán perseguidos” (2 Tim. 3:12, LBLA). Por supuesto, esto no significa que estaremos dispuestos a renunciar a la verdad para evitar problemas, “Si es posible, en cuanto de vosotros dependa, estad en paz con todos los hombres” (Rom. 12:18, LBLA).
Consejos para andar
con sabiduría para con los de afuera