Por Josué I. Hernández
“Pero con respecto a la venida de
nuestro Señor Jesucristo y a nuestra reunión con Él, os rogamos,
hermanos, que no seáis sacudidos fácilmente en vuestro modo de pensar, ni
os alarméis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera de
nosotros, en el sentido de que el día del Señor ha llegado. Que nadie os
engañe en ninguna manera, porque no vendrá sin que primero venga la apostasía y
sea revelado el hombre de pecado, el hijo de perdición” (2 Tes. 2:1-3, LBLA).
- Vendría la apostasía.
- Se manifestaría el hombre de pecado.
La apostasía vendría
La apostasía llegó
- Distinción entre clero y laicos, idea tomada del sacerdocio judío del Antiguo Testamento.
- Fiestas religiosas, tales como, La Semana Santa, y más tarde, La Navidad.
- El bautismo por verter agua, y luego por rociarla, en lugar de una inmersión.
- Concilios eclesiásticos, reuniones en las cuales se decidían asuntos doctrinales.
- Credos, declaraciones de creencias desarrolladas por los concilios de la iglesia.
- Música instrumental, la cual fue utilizándose desde el siglo V.
- Otras muchas doctrinas surgieron, por ejemplo, el pecado original, el bautismo de infantes, la penitencia, la veneración de María, el milenarismo.
La apostasía nos asedia
- No sea que nos lleve la corriente (cf. Ef. 4:14; Heb. 2:1-3).
- Cuidar el corazón (cf. Heb. 3:12,13).
- Mantener firme nuestra confianza inicial (cf. Heb. 3:14; 6:11).
Conclusión