Si un hermano invita a la iglesia al cumpleaños
de su hijo, y habrá espacio para una predicación, cantos y oraciones, ¿puede la
iglesia asistir a este cumpleaños? La pregunta demuestra confusión respecto a la
naturaleza y obra de la iglesia local, y las actividades que corresponden al
ámbito individual de los miembros que la componen. Detengámonos a pensar en
esto a la luz de las sagradas Escrituras, procurando hablar como la Biblia
habla (1 Ped. 4:11) sin ir más allá de lo que está escrito (1 Cor. 4:6). No todo lo que hacen los miembros de la iglesia
lo hace la iglesia. Por ejemplo, sujetarse al marido y amar a la esposa (Col.
3:18,19), lo hacen los cristianos que están casados, no la iglesia. La iglesia
no está casada. Así también, los cristianos que son hijos deben honrar a su
padre y a su madre (Ef. 6:1-3), sin embargo, la iglesia no tiene padre y madre
a quien honrar. Las responsabilidades de los cristianos como
individuos no son transferibles a la iglesia local (1 Tim. 5:16). No debemos
confundir oveja con rebaño, soldado con pelotón, ni futbolista con equipo. Si todos los miembros de la iglesia están
presentes en el cumpleaños, todos juntos comiendo pastel y tomando café, esta
no es la iglesia comiendo pastel y tomando café. La iglesia no tiene como
función el participar en un cumpleaños. Esta es una reunión social, de individuos
que componen la iglesia local, pero no es la iglesia haciendo su obra. En otras
palabras, lo que están haciendo los cristianos en el cumpleaños no lo está
haciendo la iglesia de la cual son miembros, porque la participación en un
cumpleaños no es el funcionamiento espiritual de la iglesia. Hermanos “conservadores”, es decir, hermanos
que no son liberales, no están entendiendo que la iglesia local hace su obra
solamente cuando los miembros que la componen trabajan en esa obra. Si los
miembros de la iglesia no están trabajando en la obra que Cristo le dio a la
iglesia, pero están todos juntos en un cumpleaños, esta no es la iglesia
asistiendo al cumpleaños. Dicho de otra manera, la iglesia local existe solamente
en su función espiritual. Cuando los miembros hacen algo diferente a la función
espiritual de la iglesia (ej. comer pastel y tomar café) la iglesia no está
haciendo su obra en ese momento. Las reuniones sociales de sano disfrute,
cuando los miembros de la iglesia se recrean, no es obra de la iglesia donde ellos
sean miembros. La iglesia no debe involucrarse
en la organización, ni en la promoción, de las actividades sociales de sus
miembros. Espero que los hermanos disfruten
del pastel, y el bonito momento que ofrecen los cumpleaños. Los cristianos
disfrutan estar juntos (Hech. 2:46). Pero, la obra de la iglesia no es asistir
a un cumpleaños.